Diciembre es el mes de los buenos
propósitos; otra cosa es que se cumplan o que hagamos todo lo posible para que
así sea. Es el mes de mayor correo postal, pues se siguen enviando tarjetas navideñas.
Este año, ALBOAN (ONG de
Cooperación Internacional de los Jesuitas en Euskadi y Navarra) ha enviado a
sus socios, y también a sus nuevos seguidores, una felicitación con una cita del Evangelio según San Juan y otra del Papa
Francisco.
Pero, por aquello de sentirse,
supongo, menos sexistas, han añadido a la cita Juan 1:14 las palabras “y nosotras”:
La Palabra se hizo carne
y habitó entre nosotros y nosotras.
¿Qué pretenden? ¿Acaso, cuando Juan
lo dijo (antes del año 70 d. C.), estaba pensando sólo en los hombres y no en
el ser humano? Tengo la impresión que al utilizar “nosotros y nosotras” lo único que hacemos es separarnos más, en dos
grupos muy diferentes. ¿No sería mejor educarnos con la idea de que el
"nosotros" incluye primero a la mujer y luego al hombre?
La ONG se ha equivocado, como otros muchos. Ahora sólo falta que, donde el Evangelio de
San Juan dice “la gloria propia del Hijo único del Padre”, pongamos "la gloria propia del Hijo (o de la Hija única) del Padre..."
Yo hubiera citado a Juan 1:3, que afirma:
Todo fue hecho por ella (la
Palabra)
y sin ella no se hizo nada
de cuanto llegó a existir.
Y sí, lo que une al hombre y a
la mujer es LA PALABRA.
¡Feliz Navidad!